Pesadilla individual

Tarea N°5

La vida efímera

Nichoca, yehua, nicnotlamati

zan nic-elnamiqui ticcauhtehuazque

yectli ya xochitl, yectli ya cuicatl.

In ma oc tonahuican, ma oc toncuicacan:

cen tiyahui, tipolihui yehua oahuaya.

Timotolinia, noyolo,yeehuaya,

Ma xic nentlamati tlalticpac yenican.

O anca yuhqui notonal, ahuaye,

Quimati, ohuaye,huixahue,

Canon nicmacehuia in mach yuhcan nitlacat

In tlalticpac ixama ihuiya ehuaya,

Ic yectli ya huelihui ahcampa nemoa,

Zan quitoa noyol. A ohuaya.

Detrás de unas flores blancas se encontraba, tratando de explicarse aquel hermoso momento que un día soñó y donde su hijo estaría al final de aquel camino lleno de luz.

Todo era borroso, de un lado de su casa se encontraban sus 6 hijas llorando y tratando de revelar lo que algunas horas antes había ocurrido. Pasando su mirada a otro extremo se encontraba sollozando su amado de hace años, se acerco y con un tierno abrazo trato de calmarlo. Sin embargo no podía llevar al consuelo a toda su familia que en esos momentos se hallaban inconsolables, ante aquel terrible laberinto de espinas que chocaban dentro de sus almas.

Al empezar el cénit incandescente la concurrencia empezó a llenar aquel patio en el que vio crecer a sus hijas y nietos; donde cada momento de risa y esplendor crecía como la familia. Toda la gente susurraba y ella no podía escuchar claramente y a detalle aquellas voces tímidas que hablaban al mismo tiempo.

Entre los susurros empezó a sentir la lenta palpitación de lo que dejaba, un estruendo en su pecho la despertaba al camino de las flores que siempre soñó. Nunca pensó que aquel momento de partida sería tan rápido y silencioso.

Sin embargo días antes con el cansancio en sus ojos, se encontraba contenta ya que había pasado algunos minutos más con el corazón palpitando y en compañía de las personas que la amaban y amaran por siempre.

Al tener cada uno de estos recuerdos en su mente y ver como la gente solo la acompañaría a donde se encontraría ya su cuerpo en descanso por la eternidad, tuvo un pequeño suspiro y de entre sus labios salieron unas palabras acogedoras mencionando que solo la vida era efímera.